Es indudable que las empresas sustentables están de moda; la realidad es que no es una moda, es una tendencia.
En este marco y ante la ola verde, es común que muchas empresas quieran subirse en este tren; una acción natural cuando los CEO´s o los CMO´s voltean para ver qué están haciendo los competidores. No es raro entonces encontrarse con que algunas compañías comiencen a incluir uno o dos productos verdes dentro de su oferta, o incluso empiecen a informar sobres sus acciones sustentables. La realidad es que estos esfuerzos aunque son buenos y necesarios, no tendrán el ROI que se lograría si la sustentabilidad estuviera implantada en el ADN de la empresa ¿Cómo es esto?
Ahora veamos la misma historia a la inversa. Una compañía que aún antes que su competencia haga algún movimiento, decide incorporar conceptos sustentables dentro de su mismo ADN, en las operaciones, en su cadena de valor, y no en un producto sino en toda su línea. El resultado final será diametralmente distinto.
En cuanto a posicionamiento, BioBaby, sin trabajar mucha publicidad, ya lleva recorrido un buen tramo, y el segmento de las madres consumidoras identifican bien a la marca. En cuanto a la inversión, una empresa que buscara pelearle uno a uno, tendría que trabajar su cadena de valor, sustituir o adoptar proveedores, eficientar procesos y materias primas, lo que demandaría costos elevados, originando que al menos en un periodo inicial, el margen de utilidad fuera mucho menor que el de BioBaby. Y aún con todo esto, habría que ver si la apuesta funciona.
Incorporar la sustentabilidad en el corazón de mismo de las operaciones es imprescindible hoy en día… no para lanzar productos con argumentos verdes, sino porque la tendencia y las legislaciones en todo el mundo apuntan hacia allá. Si no me cree, pregúntele a las armadoras de autos si no se las están viendo difíciles con las regulaciones de consumo de combustible que el gobierno de E.U. está exigiendo año con año. Pregúntele también a las empresas que quieren cotizar en bolsa todos los requisitos que necesitan cubrir en este sentido; o averigüe con los proveedores de Unilever o Walmart que necesitan cumplir scorecards verdes o sustentables.
La revolución de la sustentabilidad es inminente e imparable y es mejor cambiar hoy de forma voluntaria y paulatina que intentar hacerlo mañana de golpe, obligados y sin tener los recursos para hacerlo. Ser sustentable no significa cambiar nuestro posicionamiento a verde y sacar sólo productos ecológicos, significa cambiar a la única manera de hacer negocios hoy. [tti link=» Twittea esta frase»]Sustentable no significa productos verdes, significa cambiar a la única forma de hacer negocios hoy[/tti]
Creo que queda bastante claro a qué nos referimos…
Una empresa sustentable no es aquella que lanza productos verdes, sino aquella que ha comprendido que ésta es un requisito indispensable en las nuevas estrategias de marca y empresa. En pocos años, si la sustentabilidad no está en el ADN de una empresa, estará enferma de muerte. [tti link=» Twittea esta frase»]En pocos años, si la sustentabilidad no está en el ADN de una empresa, estará enferma de muerte.[/tti]