Desde que terminé la carrera, quizás por deformaciones propias de mi educación visual, siempre he querido tener un tapiz tipográfico para mi estudio. Al ver la portada de la revista Esquire de febrero, donde la siempre sexy actriz Sienna Miller aparece fotografiada en el rincón de un muro justo como el de mis deseos, no tuve más remedio que descubrir aquí ese pequeño trauma de diseñador.
Es intersante ver el artwork sin los elementos gráficos de una publicación y constatar el cambio dramático cuando éstos son colocados. Un diseño de portada que seguramente a más de un diseñador encantará, eso claro sin mencionar los cincuenta kilos de sensualidad que destila la modelo, clasificada recientemente como una de las cinco mejor vestidas de Reino Unido…aunque aquí, gracias a Dios, no lo demuestre.
Esquire está utilizando esta tendencia tipográfica desde septiembre del año pasado; vale la pena visitar su galería, donde tienen todas sus portadas desde 1933.
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