¿Puede vender el miedo? Por supuesto que sí… Lo acabamos de explicar en un post hace unos días. El miedo es uno de los mejores gatillos del marketing.
Como ya hemos señalado, Vance Packard ya venía analizando estos casos desde la época dorada de las agencias de publicidad, cuando urgaban en la psique de las personas y les pisaban donde más les dolía para vender… ¡Esperen! Hasta donde yo sé, todavía lo hacen… aunque claro, hoy lo disfrazan con algo más de «responsabilidad.»
Y si creen que exagero… échenle un ojo a algunos spots de vigorizantes sexuales, especialmente los éticos; denle también una mirada a los shampoos para evitar la pérdida del cabello; repasen los comerciales para cosméticos anti-edad e incluso, como en este caso, campañas de marketing social para prevención de enfermedades.
Sí. El marketing puede vendernos mundos ideales… o convertirse en el monstruo detrás de la puerta. Ésa es la magia de su poder. [tti link=» Twittea esta frase»]El marketing puede vendernos mundos ideales o ser el monstruo detrás de la puerta. Ése es su poder.[/tti]
En este caso, DDB, Vancouver, hace buen uso de una tipografía horrenda para pasarnos de manera funcional, un mensaje de prevención; y les aseguro que muchos recordamos que hace mucho tiempo no vamos al dentista… ¿No les ocurre a ustedes?
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