Tome usted una revista cualquiera y pase las hojas ¿Cuántos anuncios llamaron poderosamente su atención? Seguramente muy pocos. Hoy en día, la publicidad tiene que ser un mazaso a nuestro cerebro para que funcione.
Hot Wheels lo ha hecho perfectamente, llevando la emoción lúdica de sus productos a la vida real.
El diseño y producción de este outdoor es simplemente una maravilla, logrando la ilusión óptica de que el camino se tuerce y se convierte en un recorrido emocionante, un giro mortal, justo como si fuera una de los tantos juguetes de la marca.
La producción, obra de Ogilvy & Mather, si bien pudo resultar un poco más costosa, tampoco es que sea excesiva, lo que nos viene a confirmar nuevamente que las grandes ideas no conocen la limitante del precio.
La acción me recuerda a otra de la misma marca que se diseñó para México y en donde lo que se veía era a un niño gigante jugando con sus carritos, nuestros autos.
Think out of the box! Si la publicidad no es una ladrona de nuestros sentidos, entonces es un gasto inútil. [tti link=» Twittea esta frase»]Si la #publicidad no es una ladrona de nuestros sentidos, entonces es un gasto inútil[/tti]
GRANDIOSO!