Hace poco en ExpoManagement, Francis Ford Coppola, el aclamado director de El Padrino, compartió con los asistentes una plática en donde invitó la audiencia a preguntarle lo que quisieran. Ante la pregunta sobre qué debía hacerse para tener éxito, el director simplemente respondió «Hacer lo que uno ama«.
En este marco, Gabriela Arciga me comparte una ilustración tipográfica que realizó sin fines económicos, sólo con el deseo de obsequiarla a un amigo aficionado a la mitológica Medusa. El trabajo por entero está desarrollado sólo con tipografía y una sola palabra, el nombre de su amigo en varios idiomas. Una mezcla intensa y bien lograda de trabajo tipográfico, digital e incluso plumilla.
¿Que si ganó un centavo con ello? No… pero seguro es que experimentó esa sensación inigualable de ser diseñador.
Todos los grandes diseñadores cobran… y mucho por cada trabajo… pero la verdad es que comenzaron como todos nosotros… haciendo diseños por el simple gusto de hacerlos, por sentirse plenos… y lograron conservar ese «toque» a lo largo de su vida y de su éxito… y es que a todos nos ha pasado, el saber distinguir cuándo un diseño está hecho sólo con la cabeza y cuándo tiene fundido en su esencia, las tripas y el corazón. [tti link=» Twittea esta frase»]Todos sabemos distinguir entre un diseño hecho con la cabeza y uno hecho con las tripas y el corazón[/tti]