El sexo siempre ha sido explotado para fines publicitarios, la pregunta es ¿Qué tanto funciona? Varias veces he mencionado que cuando se trata de un producto de corte sexual, la intención está justificada, pero hay otras ocasiones en que uno dice ¿y a qué orgasmos viene al caso?
En lo personal, estoy cansado de ver este tipo de publicidad que utiliza el éxtasis femenino para vender cosméticos. En México Herbal Essences usó la misma estrategia muchos años; si bien al inicio pudo resultar algo jocosa, al paso del tiempo este tipo de diseños y campañas publicitarias lo único que provoca es indiferencia.
¿Dónde está la ventaja diferencial, el poder persuasivo o la promesa? Porque ya en estos días, no creo que haya mujeres que crean que un tratamiento capilar VO5 les vaya a producir un estímulo sexual ¿o sí?