Durante siglos la mujer ha sido vista como un objeto sexual. Es una desgracia, cierto; sin embargo es una verdad. Lo más irónico es que esta connotación, que se extiende obviamente a la publicidad, no sólo la tienen los hombres sino incluso las mujeres. Para muestra, el último anuncio de Gisele Bündchen en Brasil.
En la nación carioca, el Ministerio de Políticas para las Mujeres pidió suspender la publicidad de la supermodelo Gisele Bündchen para una marca de lencería; curiosamente no por estar subida de tono, sino por promover un estereotipo equivocado de la mujer como objeto.
El Ministerio señaló: «La propaganda refuerza el estereotipo equivocado de la mujer como objeto sexual de su marido, e ignora los grandes avances que hemos alcanzado para deconstruir prácticas y pensamientos sexistas. También representa discriminación contra la mujer.»
La campaña de la marca de lencería Hope sugiere que la sensualidad derrite a cualquier hombre y por ello las mujeres debieran usarla para minimizar las reacciones de los maridos. Gisele Bündchen, con toda la sensualidad que le caracteriza, da en spots de TV «lecciones» de cómo las féminas debieran dar las malas noticias a sus parejas: ¿Vestidas? Incorrecto. ¿En ropa interior y con una coqueta insinuación? Correcto.
Desde el punto de vista de la responsabilidad social esta publicidad es completamente incorrecta, pero no se dejen llevar, denle un vistazo al video y comenten ¿Es una exageración? ¿Es correcta la censura? La polémica está servida… recordando que aquella que no lo haya hecho que tire el primer bra… er quise decir piedra. [tti link=» Twittea esta frase»]Aquella que no lo haya hecho que tire el primer bra… er quise decir piedra[/tti]
Absolutamente exagerado, raro que la gente de Brazil tenga estos ribetes conservadores. Se trata del país de la Alegría!
(Y esta publicidad trata exactamente de eso)