—Deja a la tipografía respirar… Ese elemento se va a caer… Los gráficos deben sentirse muy constreñidos…— Eran algunas de las frases que solía decirles a mis alumnos en clase de diseño gráfico, donde intentaba hacerles ver y sentir la composición como algo vivo y no como un ente inanimado.
En este aspecto recuerdo que la mayoría de mis alumnos tenía un problema que muchos diseñadores siguen padeciendo en toda su carrera: el miedo al aire.
El aire es el espacio que rodea a cada uno de los gráficos en una composición y es tan importante como los otros factores: la mancha, el color, los tipos, las texturas, el tamaño, la dirección, el peso, etc.
No obstante lo anterior, muchos diseñadores le tienen pánico al aire, y buscan desesperadamente de llenar cada hueco existente. Yo siempre les digo —imagina que viajas dentro de un autobus ¿Te gusta el espacio o prefieres viajar apretado?—
Cuando se aprende a amar el aire, diseños elegantes comienzan a suceder. Para muestra la línea de empaques Greenpharma de España. Impresionante la limpieza con la que se manejó la tipografía (nótese como se respeta el tamaño pero juega con el peso y el medio tono); los gráficos en blanco y negro y la simbología, que explora el recurso del outline vs el color sólido para comunicar el tipo de presentación contenida en el empaque. Finalmente, el detalle del grabado en seco es ya un lujo que exacerba un concepto: el diseño como el hombre, necesita del aire para vivir. [tti link=» Twittea este concepto»]El #diseño como el hombre, necesita del aire para vivir[/tti]
Excelente caso de sintaxis de la imagen y de la importancia de la experimentación en las escuelas de diseño.
De modo mis estimados diseñadores, que la próxima vez, piérdanle el miedo a los espacios vacíos… irónicamente, son necesarios para llenar el diseño. [tti link=» Twittea este concepto»]»Los espacios vacíos… irónicamente, son necesarios para llenar el #diseño .[/tti]
Excelente explicación sobre los espacios en blanco… realmente estan avanzando muchisimo en conceptos de diseño, en mi país aún seguimos en pañales.