Hoy se celebra en México el Día del Maestro. Todos recordamos por buenos o malos a estos seres que se cruzaron en nuestras vidas. En lo personal quisiera recordar las frases de uno de ellos, un catedrático que prácticamente se convirtió para mí en mi gurú del diseño. Algunas de sus sui generis oraciones que él solía decir eran:
- Es mejor dejar pasar un perro rabioso que dejarse morder por él (Cómo me ha servido esto con muchos clientes)
- Boceta, boceta, boceta… alrededor de tu boceto número 50 comienzan a surgir buenas ideas.
- Cuando presentes alternativas de un diseño, todas deben ser muy buenas. Es muy peligroso hacer una mala porque puede gustarle al cliente (y yo añadiría: y tendrás que trabajar con ella por mucho tiempo)
- Es más difícil hacer un diseño sencillo que uno complejo.
- Hoy día, en las escuelas y con los clientes todo les urge, no hay tiempo para pensar. Se trata de un problema de cantidad vs calidad.
- Educar viene de educere: extraer; es decir, sacar lo que el alumno ya trae dentro, ayudarle a ser en plenitud
- Nunca enseñes un diseño sin terminar (un pecado que suele causar muchos dolores de cabeza con los clientes)
- Siempre pensé que la «M» de la tipografía Futura XB o Black «veáse en la imagen», usaba pantalones acampanados (cierto, muy cierto)
- Esos logotipos hechos de letras pegadas me recuerdan a los niños siameses.
- La tecnología debe servir al diseño, no el diseño a la tecnología (esa es para los amantes del software)
- Nada sustituye al poder de un lápiz y una buena idea.
- Los diseñadores de hoy ya no saben hacer diseño sólido (claro, su despacho se llamaba SoliDiseño)
- ¡Y la victoria fue nuestra! (en relación a un flirt que tuvo con una chica inglesa llamada… Victoria, por supuesto)
Y creo que al paso de los años, sólo tendría que decir: Gracias, por hacerme amar la tipografía, por hacerme ver claro lo complejo y por infundirme hambre en una disciplina que aún me sigue dando de comer… por todo ello, «Gracias, Alejandro Cruz.»