De oportunidades perdidas en marketing; la historia del peluquero, el dentista y el hotel

¿Por qué algunas marcas o negocios abandonan lo que les lleva al éxito? Hay que ser muy estúpidos para arrojar por la borda una innovación y aún así muchos lo hacen…

Hace unas semanas visité una pequeña plaza comercial al sur de la ciudad a la cual no iba desde que era una adolescente, hace ya algunos ayeres. De los viejos locales que yo recordaba no quedaba mas que uno… No estaba ya la vieja panadería, ni la tienda naturista, el expendio de posters ni ninguno otro que recordara… sólo subsistía la vieja peluquería, ésa que cuando uno necesitaba un corte, sabía que estaría abierta, porque su horario, a diferencia del resto de peluquerías en México, se extendía hasta las nueve de la noche.

Por otro lado, hace unos días, caminando cerca de mi casa me percaté que el dentista de la esquina, que durante buen tiempo colocó en su ventanal su número de móvil al lado de la palabra «Urgencias», lo había retirado, dejando sólo su número fijo. Era fin de semana… me pregunté el por qué de tan extraño movimiento.

Finalmente, hace poco, en un fin de semana que pude escaparme de vacaciones, decidí prolongar un día más mi estancia; es decir, en vez de dejar el hotel, el domingo a las 12, hora del checkout, lo hice hasta el lunes para disfrutar una jornada más de sus placenteras instalaciones y servicios. Sin embargo vi con desilusión que muchos de dichos servicios del hotel cerraban los domingos desde las 2 y por tanto, no había un alma a las tres o cuatro de la tarde.

La reflexión es que a veces NO aprovechamos las oportunidades de innovar o de ser extraordinarios… y otra veces, cuando lo hacemos, nos instalamos después rápidamente en nuestra zona de confort y olvidamos qué fue lo que nos colocó allí.

En el primer caso que cité, la innovación en el horario, fuera de lo común para una peluquería, hizo que este pequeño negocio hubiera subsisitido a lo largo del tiempo donde muchos otros no pudieron hacerlo.

En el segundo caso, el dentista quitó su letrero de urgencias y su número móvil porque muy seguramente ya no quería más clientes en situaciones u horarios extremos. Halló su zona de confort y entonces olvidó que muy probablemente lo que lo llevó a ella fue el poder dar ese servicio en horarios y situaciones extremas ¿No debía buscar entonces la forma de potenciar esa virtud en vez de eliminarla?

Finalmente, en el tercer caso, me pregunté por qué los hoteles, esos a los que vamos de fin de semana en una escapada, no vendían «extensiones de tiempo.» ¿Se imaginan la cantidad de turistas que adquiriríamos una extensión para que en vez de salir a las 12 lo hicieramos a las 18:00 hrs? Seis horas más disfrutando del hotel, consumiendo todos sus servicios y por tanto dándole a ganar más. Por supuesto que se trata de una innovación que sólo se podría aplicar en temporada baja pero sería muy rentable. En cambio, literalmente corren a toda su clientela a las 12 del día y aunque quede un poco de gente, cierran muchos de sus servicios…

Siempre como poseedores de un negocio, rogamos porque se nos presente una innovación, una oportunidad de ser extraordinarios, sin embargo, cuando llega, muchas veces NO la aprovechamos o nos instalamos en esa riesgosa zona de confort, olvidando que nosotros pedimos estar allí…

Marketing no es andar inventando anuncios… es aprovechar cada pequeña oportunidad que tenemos para ser extraordinarios. [tti link=» Twittea esta frase»]#Marketing no es andar inventando anuncios; es aprovechar cada pequeña oportunidad que tenemos para ser extraordinarios[/tti]

Sólo una pequeña reflexión sobre las oportunidades perdidas en las estrategias de marketing.