Voy a decir esto sin tacto porque esta verdad es cruda y necesita ser enunciada al desnudo: 9 de cada 10 contenidos online son contenido basura.
Llevamos más de 15 años curando y creando contenido, para nosotros y nuestros clientes, orientado a aparecer en las SERP de Google así como en redes sociales.
Al inicio era sencillo ser innovador, la competencia era poca y todo era relativamente nuevo.
Al paso del tiempo y con la evolución de las herramientas, cualquier persona se convirtió en creadora de contenido por lo que destacar hoy se ha vuelto una tarea extremedamente difícil.
5 razones por las que hoy, la mayoría es contenido basura
Hoy, la mayoría del contenido padece de uno de estos problemas:
- Contenido genérico que no está pensado en una audiencia objetivo definida (buyer persona)
- El mismo contenido que se puede encontrar en cualquier sitio de la competencia
- Contenido solo accesible por suscripción
- Contenido con datos e información desactualizada.
- Contenido que solo habla de los productos o servicios de la empresa, dejando de ser útil para ser un pitch de venta.
¿Hay una solución al contenido basura?
La respuesta es un sí rotundo: contenido emperradamente diferente y único.
El problema es que las empresas consideran que pueden solventarlo con un redactor mediano al que simplemente le demos un brief y un calendario editorial. O peor… con Chat GPT. Grave error.
Ese comportamiento es como tener un cálculo biliar y ver al médico generalista asumiendo que nos dará unas tabletas que resolverán todo.
4 acciones a implementar para evitar hacer contenido basura
1 Convertirnos en medio
Lo primero es un cambio de mindset por completo. El blog, portal y redes sociales de la empresa deben convertirse en un medio… pero no cualquier medio, uno especializado, como hoy podríamos pensar en un programa de televisión de prestigio, una columna de diario o revista muy reconocida, un programa radiofónico de alto rating, etc.
Si pensamos que nuestro blog o portal debe ser así, no nos atreveríamos a ofrecer información mediocre o repetida ¿cierto? Buscaríamos el enfoque más distintivo que pudiéramos lograr.
Se trata de definir una filosofía y reconocer que nuestra audiencia quiere más que información y datos; anhelan profundidad, análisis, innovación y, sobre todo, contenido que inspire confianza y le haga saber que nuestra empresa es la experta absoluto en aquello de lo que hablamos.
2 Desarrollar contenido actual con ayuda de la audiencia
Todos los días son una oportunidad para preguntarle a nuestra audiencia sobre temas actuales. Esto no solo ayuda al engagement de nuestras redes, sino que proporciona puntos de vista en boga.
Las encuestas funcionan bien de forma orgánica en Linkedin y a veces en Instagram (dependiendo del giro). En Twitter con algo de inversión podemos levantar cientos de respuestas.
Para uno de nuestros clientes, invertimos 5 dólares en cada encuesta que publicamos y obtenemos entre 100 y 500 respuestas dependiendo del tema.
Una vez que hemos levantado la encuesta, es factible crear un contenido hablando de distintos puntos de vista sobre aquello que hemos preguntado. Incluso, algunas de las personas que respondan la encuesta, añadirán comentarios.
Este tipo de contenido que generemos será único en su clase porque nos habremos convertido en la fuente primaria del mismo.
3 Apóyate en un experto/a invitado/a
Las personas expertas ganan su autoridad de expertise cuando los medios les publican. Haz un análisis de todas aquellas personas en tu nicho a quien pudieras recurrir para ello. Te sorprenderás de que conoces a más de las que piensas.
Pídeles desarrollar un contenido para el blog acerca de su área de expertise. La mayoría aceptará de buen agrado. Incluso algunos podrían aceptar hacerlo en una video llamada, lo que te permitiría editar y crear más contenido usando la misma.
Este contenido, al igual que la encuesta, también será completamente original y único… y su calidad dependerá de lo inteligentes que puedan ser las preguntas que realicemos.
4 Triturar el contenido
El contenido de un paper, o los artículos en el blog de la empresa o portal son la columna vertebral, pero de ellos saldrán los contenidos para redes sociales.
Los párrafos pueden convertirse en posteos de Linkedin, animaciones o reels, mientras que las frases relevantes o datos pueden volverse quotes o infográficos.
Necesitamos triturar nuestros contenidos. Esto significa dividir una pieza grande e importante en porciones más pequeñas que puedan reutilizarse en redes sociales.
Un solo contenido semanal puede darnos material diario para social media.
Como verás, eliminar el contenido basura de la ecuación no es difícil, pero lo que sí lo es es pensar que se puede hacer solo con una persona y briefs mediocres para crear contenidos que solo cubran cuotas. Si nuestra mentalidad es esta, es mejor no intentarlo.
El contenido es nuestra tarjeta de presentación ante cualquier prospecto; es lo unico que demostrará cuánto sabemos, qué enfoque tenemos y por qué debe sentirse seguro de contratarnos.
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