¿Cómo vencer el miedo? ¡Con marketing, por supuesto!

¿Puede un libro de 1957 ser actual hoy en día? ¡Oh sí! Vance Packard descubrió que las mejores campañas de publicidad están cimentadas en una pregunta básica ¿Cómo vencer el miedo? Nuestros temores más ocultos son el arma perfecta del marketing ¿No me crees? Echemos un vistazo.

Vance Packard escribió «Las formas ocultas de la propaganda» a medidados del siglo pasado, un libro donde recoge los resultados de una tonga de entrevistas a profundidad hechas en el campo del marketing y la publicidad. Lo que encontró es literalmente para dar miedo; Packard explica que es una falacia que seamos consumidores racionales, siempre obedecemos a impulsos del subconsciente, deseos, temores y frustraciones ocultas que las grandes marcas han aprendido a manejar, disparando así nuestros gatillos de compra.

El libro es una auténtica joya y es uno de los 10 mejores sobre marketing y publicidad que puedo recomendar. Hablar de toda la obra sería un intento fútil, pero hablar de 7 formas en que las marcas manipulan nuestros miedos, eso sí lo podemos hacer, e incluso, mostrar ejemplos. Los mejores productos de marketing están hechos para matar a nuestras peores pesadillas. [tti link=»Twittea esta frase»]Los mejores productos de marketing están hechos para matar a nuestras peores pesadillas.[/tti]

7 formas en que las marcas manipulan nuestros miedos

Miedo a no valer lo que creemos valer

La persona más segura del mundo… en realidad no está tan segura de sí misma. Todos los productos enfocados a enaltecer nuestro orgullo, están diseñados para matar nuestro miedo a la poca valía.

Miedo a la vida que se escapa

¿Cuál es tu rutina? Te levantas, trabajas, comes, ves a tu familia, duermes y así día a día. La vida se te está yendo ¿lo sabías? No te preocupes… esto que acabas de sentir, lo siente todo el mundo y por tanto, es necesario escapar de vez en cuando y «sentir que vives». Como decía Lennon: La vida es eso que pasa mientras pensamos en otra cosa. ¿Es casual el nombre «Escape»?

¿Será una coincidencia el nombre «Escape»? y que el mismo slogan de Ford sea «Go further»?

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Miedo a no tener poder

Todos los seres humanos aman el poder, por desgracia no todos saben usarlo, pero es una gran arma de venta en marketing y publicidad, quizás de las más usadas. Poder para tomar decisiones, poder mental, poder físico… una enorme cantidad de publicidad gira en torno al poder.

Miedo a no ser sexualmente atractivos

Toneladas de dinero se han amasado bajo esta premisa. Desde cosméticos hasta medicamentos. Desde accesorios deportivos hasta rejuvenecedores. Las industrias que manejan este tipo de publicidad entienden perfectamente cuál es la ventana de oportunidad y el ciclo de vida de su producto.

Miedo a no pertenecer

Otro de los favoritos de los publicistas y también una de las razones por las cuales las redes sociales tienen tanto éxito e incluso los prosumers. La gente no quiere estar sola, le gusta pertenecer a comunidades, a tribus, no importa si se trata de familia, clubes, escuelas, aficiones… o marcas. Apple fue durante años un maestro en esto. Ahora que Steve Jobs se ha ido, han perdido un poco ese toque pero dejó escuela en este tipo de publicidad. Bien lo dijo… Apple no tiene clientes, tiene fans. [tti link=»Twittea esta frase»]Apple no tiene clientes, tiene fans.[/tti]

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Miedo a la enfermedad

No tengo que decirte la cantidad de productos que se han vendido gracias a este miedo. Algunos bien enfocados y con justa razón, como aquellos que son preventivos en algunos tipos de cáncer o hasta de higiene bucal; por desgracia hay marcas que han lucrado con esto hasta el exceso, aprovechándose del temor y la ignorancia de los consumidores; y para muestra…

Miedo a la muerte

Bueno y si la enfermedad nos da miedo, la muerte nos aterra… ¿o no? Irónicamente la respuesta es no. Packard descubrió que el miedo a la muerte en muchos casos no es a la muerte física, si no a que nadie nos recuerde. Muchas aseguradoras saben eso.

Pues bien, he aquí, 8 formas en que el marketing manipula nuestros miedos, algunas de forma «ética» o controlada y otros en forma desmedida ¿Qué te parece? Para dar miedo… ¿o no?