Sabemos que el engagement marketing es el arte de construir marcas amadas y admiradas, pero a que nunca te imaginaste que esto pudiera lograrse con un perro.
El video está ya dando la vuelta al mundo, arrancando suspiros y lágrimas de emoción en todos los países. Se trata del nuevo empleado de la aerolínea holandesa KLM en el aeropuerto de Chipol, en Amsterdam.
El peludo nuevo integrante responde al nombre de Sherlock y su puesto no es otro que el buscador de personas que hayan extraviado algún objeto durante su vuelo; en otras palabras, el animal, que por si fuera poco desborda ternura, localiza a los propietarios de aquellos que extraviaron alguna parte de su equipaje u objeto personal, y su misión crucial es hacerlo antes de que estos dejen el aeropuerto.
¿Cómo lo logra? Cual perro de caza… con su olfato, claro. Lo fantástico del hecho es que su récord de bateo es altísimo ¡Logra devolver 8 de cada 10 objetos! y obvio, la reacción de aquellos a quienes se les regresa su pertenencia es de sorpresa y enorme emoción. Mira el video… hay quienes lo abrazan e incluso se toman selfies con él.
Claro que esto genera un poderosísismo engagement con los clientes cautivos que seguro volverán a comprar un boleto con esta línea, pero ¿cómo hacer lo mismo con los potenciales? La respuesta es obvia… haciendo un pequeño video y subiéndolo a la web… y como pólvora con chispa, las redes sociales harán el resto.
Hoy, el video inunda las pantallas de todo el mundo y las reproducciones, así como las conexiones emocionales que está alcanzando, KLM no las hubiera podido pagar con nada.
