Britney y sus lágrimas: un caso de sorna publicitaria - Luis Maram

Britney y sus lágrimas: un caso de sorna publicitaria



Nuevamente nos hallamos frente a un caso que aprovecha el nombre de una artista (Britney Spears), para hacerse publicidad. La diferencia aquí­ es el uso de la sorna para ello. El resultado devenido de esta acción pudiera ser cool en el nicho a quien va dirigido; la risa siempre tendrá poder de persuasión y empatí­a.

El manejo del look & feel es inmejorable, batiendo en un cursi diseño, la cultura pop de finales de milenio y la melosidad de aquella chica de rostro angelical que en aquel entonces decí­a ser virgen, para después verse inmersa en mil y un escándalos y cantar Ooops I did it again!

Excelente manejo retórico del escarnio y un brillante copy para anunciar Radio Warszawa 106.8, una estación de jazz, es decir, la antí­tesis de todo lo que Britney representa. Un concepto divertido, un anuncio encantador.

Advertising Agency: McCann Erickson, Warsaw, Poland
Creative Directors: Iwona Kluszczynska, Wojciech Dagiel
Art Director: Grzegorz Kluczykowski
Copywriter: Katarzyna Kotowska
Art Buying: Karolina Czaplarska, Monika Dagiel
Illustrator: Grzegorz Kluczykowski
Published: March 2007

Acerca del autor

Luis Maram

MBA, speaker internacional, Master en Inbound Marketing, especializado en Reputación corporativa. Estratega de contenidos; editor en jefe de este sitio enfocado a cómo crear contenidos que tu audiencia quiera ver, vivir y compartir. Consultas o conferencias de marketing.

3 Comentarios

  • Pues siendo un aficionado al Jazz, la verdad es que no termino de ver como el anuncio llamarí­a mi atencion como para sintonizarla. Fuera del juego de palabras, lo veo vago, vago.

  • Musicalmente, el jazz nace de la combinacion de la música autoctona estadounidense, la africana y la europea.

    Las primeras manifestaciones musicales afroamericanas eran una mezcla de ritmos e instrumentos asociadas a la vida de los esclavos en las colonias norteamericanas, de modo que tení­a per se un alma melancolica y de rebeldí­a a causa de que tení­an prohibido hacer y escuchar música.

    De modo que contraponer todo lo alegre, superfluo y vano que podrí­a resultar Britney Spears a Britney’s Tears, y hacerlo especí­ficamente en estos dí­as en que la estrella ha caí­do en desgracia, es trágicamente exquisito.

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