Casi todas las empresas tienen momentos en los que necesitan más efectivo de lo que tienen a mano.
Las cosas pasan. No siempre se les espera y no siempre son agradables. El equipo se descompone. Surge un fuego en la cocina. Hay declinaciones comerciales por alguna razón y se necesita dinero para arreglar las cosas y superar estos problemas.
También hay un lado positivo: un préstamo para pequeñas empresas puede ayudar a expandirnos o a aprovechar esa oportunidad que nos ayude a desarrollar o penetrar mejor el mercado. A veces se necesita dinero extra para remodelar, comprar una oficina nueva, aumentar la cantidad de personas y/o suministros… y sin el dinero a mano, se pierde la oportunidad.
Muchos propietarios de negocios recurren a tarjetas de crédito comerciales o incluso personales, financiando anticipos en efectivo o compras más grandes con la intención de liquidarlos durante varios meses. ¿Es esto una buena opción?
Las tarjetas de crédito se utilizan mejor para el gasto diario y cuando la intención es devolver rápidamente. Llevar un gran saldo de la tarjeta de crédito mes a mes puede ser una carga muy pesada en el largo plazo, especialmente dado que la mayoría de las tarjetas tienen una alta tasa de interés.
En esta situación, tener otras opciones podría ofrecer una ventaja financiera.
Crédito de capital de trabajo
Contar con un crédito como capital de trabajo le permite a tu empresa aprovechar los fondos para cerrar brechas en el flujo de efectivo o expandir el negocio permitiéndote aprovechar ventanas de oportunidad sin vaciar tus ahorros.
Incluso, en ocasiones, solicitar una línea de crédito antes de que la necesites de verdad, te da la flexibilidad de tomar mejores decisiones para tu negocio en un momento adecuado.
Los préstamos de capital de trabajo son diferentes de los préstamos tradicionales «a término» de un banco. Los préstamos a plazo brindan una sola y gran suma de dinero para una inversión específica a largo plazo: comprar bienes inmuebles, equipo pesado, etc. Debido a que estás pidiendo prestado mucho dinero, tienes varios años para pagar, por lo que la deuda es larga.
Los préstamos de capital de trabajo dan a las pequeñas empresas alternativas a los préstamos bancarios. Es más fácil calificar. El proceso de solicitud es mucho más simple y rápido, de hecho, puedes obtener el dinero que necesita dentro de unos días.
¿Cuáles son los requisitos que se suelen pedir para que te otorguen un crédito?
- Buen historial crediticio de la empresa que solicita el crédito, así como de sus principales accionistas y avales.
- Especificar el destino del crédito.
- Evaluación cuantitativa y cualitativa.
¿Cuánto tarda una autorización de un crédito?
Los créditos de esta naturaleza se otorgan a personas morales, como capital de trabajo y suelen resolverse rápidamente, digamos en unos cinco días hábiles.
¿Qué documentos suele necesitar una empresa para solicitarlo?
Dependiendo de la institución a donde se pida, los requerimientos pueden variar, pero normalmente entre los más recurrentes se encuentran los siguientes:
- Solicitud de crédito.
- Autorización para la consulta de tu buró de crédito.
- Acta constitutiva
- Estados financieros de los últimos dos ejercicios
- Organigrama de la empresa.
De modo que ya los sabes, no entorpezcas el futuro de tu negocio pensando que el dinero es una barrera; el único límite es tu imaginación.
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