Recientemente llegó a nuestras manos un artículo bastante crítico sobre la evolución de las redes sociales; en él se indicaba que estadísticamente, éstas no estaban generando conversiones significativas y que en realidad aunque las marcas señalaban que buscaban crear engagement con ellas, las seguían tratando de enfocar como canales de venta. También se mencionaba que por otro lado, los esfuerzos de e-commerce continuaban creciendo en el mundo y que, a diferencia del social media, tenían una mucho mejor tasa de conversión cuando los sitios estaban bien optimizados para ello.
El trasfondo de esto es sencillo; los usuarios están en sus redes para socializar, no para comprar; a diferencia de los sitios de e-commerce a los que llega con la intención clara de adquirir un producto o al menos informarse sobre él. A los usuarios no les gusta mezclar estos mundos… pero si esto es así, qué prácticas podríamos aplicar en nuestro e-commerce para hacerlo aún más efectivo. Para responder a esa pregunta, te traemos tres tips sencillos que puedes implementar desde hoy en tus esfuerzos online.
Conoce a tu cliente como a ti mismo
Para lograr promocionar y comercializar un producto se requiere un enfoque en el cliente en primer lugar; es imprescindible definirlo a detalle y ofrecerle los productos que específicamente requiere y no una gama inmensa que no necesita. Las marcas de más rápido crecimiento en el comercio electrónico perfeccionan la venta de un primer producto con su grupo objetivo antes de pretender venderle otras mil opciones. Cuando están listas para expandir su selección, lo hacen de manera conservadora, añadiendo nuevos productos y líneas sólo en la medida que puedan mantener los mismos estándares de alta calidad para su consumidor. Un buen ejemplo lo tenemos con esta búsqueda de ofertas online en teléfonos fijos, donde puedes ver que en los resultados no aparece un número gigantesco de unidades sino solo una cantidad reducida pero de máxima calidad, con lo que se incentiva bastante la conversión.
Reune una lista de correo electrónico
El email marketing es, por un amplio margen, uno de los canales más eficaces y rentables de marketing online para las empresas. Un estudio de la consultora McKinsey & Company sugiere: «El e-mail sigue siendo significativamente un canal más efectivo para adquirir clientes que las redes sociales; tiene casi 40 veces la eficacia de Facebook y Twitter combinados.» Construir una buena base datos para e-mail marketing, ya sea a través de ofrecer descuentos, promociones, concursos o contenidos, es una de las mejores formas de crear un canal privado a fin de conectar individualmente con los clientes, lo que por supuesto redunda en una mejor conversión; y esto es porque es más fácil que nos compre un lead (un usuario que nos ha dado permiso de contactarle) a que lo haga un simple visitante de nuestro site.
Usa la publicidad online de forma inteligente
Para muchos empresarios, es sorprendente como puede irse su presupuesto de marketing mensual en cuestión de horas si está mal invertido. Los posts patrocinados de Facebook, o los anuncios PPC de Google, pueden evaporar tu dinero si no has hecho un buen análisis de quién es tu grupo objetivo y qué opciones le vas a ofrecer, como ya lo mencionamos. Una vez que se ha logrado lo anterior y has decidido invertir en publicidad online, hay que hacer pequeñas pruebas con las diferentes alternativas publicitarias con las que cuenta la web, desarrollando buenas creatividades para los medios en los que decidas lanzarlas, ya sean sociales, contenidos o display. La sugerencia es prueba todas tus campañas con un presupuesto limitado para que veas cómo funcionan y cuál es tu tasa de conversión para cada una; una vez analizado esto, escoge la mejor y entonces sí, lánzala a gran escala.
Helos allí, tres tips sencillos que pueden ayudarte con tus conversiones y que sin duda serán un buen impulso para la planeación de futuros lanzamientos en tu e-commerce.
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