Por Alberto Soro
La importancia de la web de una empresa ha variado mucho en los últimos años; ha dejado de ser una presencia simple online para convertirse en una herramienta de marketing de atracción hacia el visitante con la que se pueden conseguir un gran número de ventas.
Web page, vía Shutterstock
Si eres una empresa y tu página tiene fines de negocio, estos consejos te serán de utilidad:
1) Añade un “blog” a tu web.
¿Te suena la frase “el contenido es el rey”? Da valor a tus visitantes, apórtales material a través de un blog actualizado constantemente que vaya más allá de buscar la mera transacción económica.
2) Añade botones para compartir en redes sociales.
El buen contenido motiva a la gente a compartirlo, lo que atrae a más visitantes que quedan expuestos a nuestros productos o servicios aunque el objetivo de su visita no fuera contratar o comprar nada.
3) Potencia tus propias redes.
Dependiendo del tipo de negocio y estudiando dónde se mueven más tus clientes, dedícale esfuerzos a Twitter, Facebook, Instagram, Linkedin… Eso sí, mejor centrarse en una o dos que tratar de abarcar muchas y quedarse en todas ellas a medias.
4) Hazles fácil el contactar.
No me refiero a exponer diez emails y cinco números de teléfono, sino a que estén visibles y no tengan que bajar hasta el fondo de la página para ver el correo en letras minúsculas.
5) SEO
No olvides optimizar los textos para mejorar el SEO (si utilizas WordPress, Yoast es tu mejor opción).
6) Crea distintos “niveles de compra”.
Algunos clientes entran conociendo el producto/servicio y van a comprarlo, así que solo necesitan un botón tipo “comprar” o “contratar”. Otros clientes quieren saber más, necesitan más información. Por ello está bien crear una pestaña del mismo estilo y muy cerca de la anterior donde solo tengan que dejar nombre y email o teléfono y así mandarles más información. Con ello nos aseguramos unos leads más.
7) Realiza tests A/B.
Una de las mejores formas de saber lo que funciona y lo que no es hacer tests A/B. Es asombroso como una simple recolocación de los elementos de una web puede variar los resultados.
8) Pon énfasis en tu e-mail marketing
El e-mail marketing es una de las herramientas más poderosas. Dales razones para que se suscriban y sigan en esa lista, (al menos dos de cada cinco de tus e-mails deberían ser no comerciales).
9) Estudia a la competencia online.
¿Cómo son sus webs? ¿Qué tienen mejor que la mía? ¿En qué son peores? Un buen benchmarking puede darnos mucha información e ideas para mejorar.
10) Obtén información de primera mano.
¿Qué te parece enviar una encuesta con cuatro o cinco sencillas pero críticas preguntas sobre tu negocio a tus clientes? Esa información es oro. Eso sí, para realizarla adecuadamente, debemos dar una recompensa. (Por ejemplo sortear alguno de nuestros productos/servicios).
Por todo ello, la web de una empresa es hoy en día un pilar fundamental, el cual, según se trabaje, puede ayudarnos a alcanzar los objetivos previstos. Estos diez puntos son una pequeña columna vertebral en esa dirección.
Por Alberto Soro